Porqué el Sirope de agave es el peor endulzante disfrazado de saludable?
Para obtener el sirope de ágave se realiza la degradación enzimática de los carbohidratos, los fructosanos, en azucares simples. Luego se filtra y se calienta hasta lograr una consistencia similar a la de la miel.
Tiene un IG de 15 (el índice glucemico determina la velocidad con la que un alimento hace aumentar los niveles de glucosa en sangre), y entre el 79 al 97% de fructuosa.
Hasta aquí todos los comprendimos, verdad? Pero ahora tengo que explicarte la parte que no te cuentan ni las etiquetas ni los que te venden el sirope de ágave como un endulzante saludable.
Lo que solemos encontrar en el mercado es un líquido de color ámbar que no es más queun JARABE DE FRUCTUOSA, realizado en laboratorios, falto de prácticamente todo valor nutritivo, y que puede provocar diversos problemas metabólicos. Lo mismo que ha sucedido años atrás con el Jarabe de maíz de alta fructuosa (JMAF).
Y que es lo que lo hace tan malo, te estarás preguntando?
Tenemos la creencia que cuando hablamos de fructuosa, nos estamos refiriendo a la fruta así como la conocemos, caída del árbol y entera lista para comer, por qué habría de hacerme daño la fructuosa si viene de la naturaleza?
La verdad es que cuando hablamos de fructosa no nos referimos a la natural de la fruta, sino a la que obtenemos por algún proceso industrial o bien en el laboratorio, que es incorporada a nuestro organismo mediante algún producto procesado. Y al ser tan barata se utiliza en toda la industria alimenticia; esto hace que los alimentos tengan mucho mejor sabor, y no es que sea mala así porque sí, sino que lo son las dosis abusivas que estamos consumiendo. La fructuosa se convierte en un potente veneno cuando se superan las dosis recomendadas, osea 25 gr al día (equivale a una cucharada), quiere decir el total de ingesta de azúcares libres por día (azúcar libre se denomina a que añadimos a los alimentos como el azúcar común, fructosa, siropes y al que se utiliza como un ingrediente más en alimentos procesados, sean éstos aparentemente dulces o no). Y estamos consumiendo entre un 70 y 100 gr al día, osea superando ampliamente la ingesta diaria recomendada, verdad?
Lo que sucede con la fructuosa es lo siguiente:
El cuerpo metaboliza la fructosa de una manera muy diferente de la glucosa. Esta ultima es utilizada por cada una de nuestras células, a las que le aporta energía. Mientras que la fructosa se descompone en el hígado y almacena en forma de reserva, osea en GRASA!
Que el sirope de ágave, engorda?? Pero que me estás contando??
Bueno, mejor te lo explico…
Lo que quizás es lo mas insalubre en la fructosa, si bien no sube el indice glucemico rápidamente; sí se metaboliza en grasa en tu cuerpo más rápidamente que cualquier otro azúcar y como te dije antes, la carga completa para metabolizar la fructosa recae en el hígado, lo que promueve un tipo peligroso de grasa corporal, es decir, la grasa adiposa. Este es el tipo de grasa se acumula en su región abdominal y se asocia con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca, además de diabetes tipo 2, niveles elevados de triglicéridos y colesterol LDL (malo), presión arterial alta, eleva la glucosa, enfermedad hepática, hígado graso, típico síndrome metabólico clásico; eleva los niveles de ácido úrico, que es en realidad más peligroso que los niveles elevados de colesterol, ya que causa inflamación crónica de bajo nivel.
Y como si todo esto fuera poco, la fructuosa engaña a tu metabolismo, ya que apaga el sistema de control del apetito. La fructosa no estimula adecuadamente la insulina, que a su vez, no suprime la grelina (hormona del hambre) y no estimula la leptina (hormona de la saciedad), osea que te hace comer más y que con el tiempo puedas desarrollar resistencia a la insulina.
Todo esto puede rápidamente conducir al aumento de peso y obesidad abdominal («panza de cerveza”).
En resumen: el consumo diario y superando la dosis máxima recomendada del sirope de agave como de otros «azúcares libres» tiene las siguientes desventajas:
• Aunque su índice glucemico es bajo, tiene doble filo por lo cual no es apto para diabéticos
• El nivel de fructuosa es tan alto que tu hígado tiene que trabajar mucho más para tratar de metabolizarlo
• Lo que no metabolice el hígado se convertirá en grasa
• No suprime la hormona del hambre ni estimula la de la saciedad: comerás más
• Se asocia a enfermedades cardiovasculares, diabetes, acido urico, etc.
• La mayoría del agave disponible en el mercado se convierte en jarabe rico en fructosa usando enzimas transgénicas y un intenso proceso químico que implica ácidos cáusticos, clarificadores, y productos químicos de filtración como: Carbón activado, Resinas catiónicas e iónicas, Ácido sulfúrico y/o fluorhídrico, Dicalite, Clarimex Enzimas de inulina, etc.
• Además, para ser lo que es, su precio es significativamente excesivo
Que hacer?
Lo ideal sería que NO lo consumieras a diario, que lo dejaras para usos ocasionales y que priorizaras otros endulzantes mucho mejores como los que publiqué aquí.
Si igual sigues insistiendo, te diría que busques una marca fiable con criterios éticos como
• Que trabajen con los pueblos indígenas
• Utilicen agave orgánico como materia prima, libre de pesticidas
• Lo procesen a bajas temperaturas para conservar todas las enzimas naturales
• Que produzcan un sirope de agave con el 50% menos fructosa en lugar de más del 90%
No es por darte más malas noticias, pero el sirope de arce o cualquier otro sirope vegetal, se producen de forma muy parecida a cómo se obtiene el sirope de ágave.
No olvides que detrás de cada producto hay una empresa que vela por sus intereses, no los tuyos!
Busca otras alternativas seguras, saludables y sostenibles!
[expand title=»Fuentes y Referencias»]
• Morell SF and Nagel R. «Agave nectar: Worse than we thought,» April 30, 2009. Weston A. Price Foundation
• «US Patent 5846333—Method of producing fructose syrup from agave plants,» Patent Storm
• http://www.cell.com/cell-metabolism/fulltext/S1550-4131(17)30729-5?_returnURL=https%3A%2F%2Flinkinghub.elsevier.com%2Fretrieve%2Fpii%2FS1550413117307295%3Fshowall%3Dtrue
• https://articulos.mercola.com/sitios/articulos/archivo/2014/08/13/cuidado-con-la-miel-de-agave.aspx
• Carr C. «Agave’s sweet spot,» January 31, 2009. Time Magazine
• Teff, K. L.; Elliott, S. S., Tschöp, M., Kieffer, T. J., Rader. D., Heiman, M., Townsend, R. R., Keim, N. L., D’Alessio, D., Havel, P. J. (2004). “«Dietary fructose reduces circulating insulin and leptin, attenuates postprandial suppression of ghrelin, and increases triglycerides in women.» J Clin Endocrinol Metab. 89 (6): 2963-72.[/expand]